Un incendio de una magnitud sin precedentes ha azotado Gran Canaria, una de las islas que conforman el archipiélago de las Islas Canarias, situado junto a la costa noroeste de África. El fuego, que comenzó el sábado 17 de agosto, ha empezado a remitir después de devastar unas 10.000 hectáreas de terreno y provocar el desalojo de más de 9.000 personas.