El tiempo influye en muchos aspectos de nuestra vida cotidiana. Además de estar relacionado con la salud pública y con nuestro bienestar, las condiciones meteorológicas afectan a muchos sectores de la economía, tales como la agricultura, el comercio, la industria, el transporte o el turismo. Una fuerte nevada puede llegar a paralizar todo el sistema de transporte, una ola de calor dispara la demanda de agua y los fenómenos extremos, como los huracanes, pueden llegar a devastar toda una región.