
El martes por la tarde, tras un modesto encendido de sus motores, el satélite de la ESA que catalogará mil millones de estrellas entró en su órbita operacional alrededor del ‘L2’, un punto virtual en mitad de la nada. Pero, ¿cómo se puede mantener girando en torno a un punto vacío? ¿y quién le indicó cómo llegar hasta este peculiar lugar?









