El pasado día 21 de agosto la misión de la ESA para censar mil millones de estrellas, Gaia, completó su primer año de observaciones científicas en modo principal.

Esta imagen tomada por el observatorio espacial XMM-Newton de la ESA muestra una serie de restos de estrellas y su poderosa acción sobre el gas que los rodea, poniendo de manifiesto algunos de los procesos más energéticos que tienen lugar en el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea.

El próximo mes de noviembre un lanzador Vega pondrá en órbita al satélite LISA Pathfinder de la ESA, cuya misión consistirá en poner a prueba las tecnologías necesarias para detectar las ondas gravitatorias. El satélite ya está listo para ser trasladado al Centro Espacial Europeo en Kourou, Guayana Francesa, para comenzar los preparativos para su lanzamiento. La ESA y Airbus Defence & Space se complacen en invitar a los medios de comunicación al centro de ensayos espaciales de IABG en Ottobrunn, cerca de Múnich, Alemania, para ver el satélite por última vez.

Aunque parezcan unas persianas venecianas, estas delicadas láminas metálicas forman parte de un importante sistema que hace posible que la sonda Rosetta de la ESA pueda operar con normalidad tanto en el cálido Sistema Solar interior como en el gélido cinturón de asteroides.

La galaxia de Andrómeda es uno de los objetos más lejanos que podemos ver a simple vista. La luz que hoy nos llega de ella fue emitida hace 2.5 millones de años. Aunque pueda parecer muy remota, en realidad forma parte de nuestro ‘vecindario’ cósmico, ya que Andrómeda es una de las galaxias más cercanas a la Vía Láctea.