
Construir un telescopio espacial no es nada fácil. Las condiciones aquí en la Tierra son drásticamente diferentes a las que se encontrará en órbita a nuestro planeta. Entonces, ¿cómo podemos asegurar que un telescopio construido en un laboratorio va a ser capaz de soportar el inhóspito entorno espacial?

Este mes Space visita varias empresas europeas de reciente creación que buscan aplicar la tecnología espacial aquí en la Tierra.
Las misiones espaciales fuerzan los límites de la ingeniería y ese conocimiento se ha trasladado, desde hace años, a nuestra vida diaria a través de aparatos e inventos innovadores.
Hemos visitado dos de las once incubadoras de empresas que la ESA posee en Europa, una en Barcelona y otra cerca de Oxford. Allí hemos descubierto varios proyectos que ya están, literalmente, despegando.