
La materia oscura es la más abundante en el universo, y aún así sigue siendo una gran desconocida. Nunca ha sido detectada directamente, pues es por ahora invisible, y de ella solo se sabe que su fuerza de gravedad influye en el resto de objetos del universo. El telescopio espacial de rayos X de la ESA, XMM-Newton, ha anunciado que uno de sus principales retos para el próximo año será la búsqueda de esta materia con un programa de observación de casi 1.4 millones de segundos.

La mayoría de los fenómenos cósmicos se producen a lo largo de miles de años, haciendo imposible estudiar su evolución en una escala de tiempo humano. Las supernovas son la gran excepción, ya que estas potentes explosiones hacen que una estrella brille tanto como toda una galaxia durante varios días.