
La imagen de hoy nos muestra una peculiar formación de gas y polvo en el centro de la Vía Láctea, capturada por las cámaras del infrarrojo lejano a bordo del observatorio espacial Herschel de la ESA. La línea casi continua de cúmulos densos y fríos de material forma un símbolo de infinito, u ocho inclinado, de varios cientos de años luz de longitud. En la imagen, la línea da la vuelta sobre su propio eje en un movimiento que va aproximadamente de arriba a la izquierda hacia abajo a la derecha.

En una misión tripulada a Marte, solo en el viaje de ida y vuelta los astronautas quedarían expuestos como mínimo al 60 % del límite de radiación total recomendado para toda su carrera. Esto es lo que se desprende de los datos recopilados por el Satélite para el estudio de Gases Traza (TGO) de ExoMars presentados esta semana en Berlín (Alemania) durante el Congreso Europeo de Ciencia Planetaria EPSC.