
El último detector atmosférico de la Estación Espacial Internacional ya está ofreciendo resultados sobre los niveles de ozono, aerosoles y trióxido de nitrógeno en nuestro planeta con ayuda de la ESA. Instalado el año pasado, el sensor de la NASA realiza un seguimiento del Sol y la Luna para estudiar los componentes de nuestra atmósfera.

Los millones de toneladas de plástico que acaban cada año en los océanos constituyen un desafío mundial. La ESA ha decidido responder con la detección desde el espacio de los desechos plásticos marinos para poder elaborar un mapa de sus mayores concentraciones y comprender la enorme escala del problema.

La Nebulosa del Cangrejo es un remanente de supernova situado a unos 6.500 años luz de la Tierra, en la constelación de Taurus. En el centro de la nebulosa hay un púlsar, restos de una estrella que explotó y dio lugar a la nebulosa. Este púlsar rota a aproximadamente 30 revoluciones por segundo, lanzando un haz de ondas de radio a través de la Galaxia. Parte del material que rodea el púlsar fue expulsado antes de la explosión estelar, mientras que el resto lo hizo durante la supernova. El viento del púlsar escapa a gran velocidad, creando una estructura dinámica al interactuar con el material eyectado.